Llevo un mes dándole vueltas en la cabeza al tema de este artículo. Pensé hacerlo podcast pero no consigo sacar el tiempo para grabar. Todo ello ha derivado en la sucesión de más acontecimientos al respecto y por fin hoy me he decidido a escribir sobre el tema.
A mediados de noviembre iTunes puso a la venta por fin el catálogo completo de The Beatles. El hecho supuso un gran revuelo, ya que el anuncio previo rodeado de misterio hizo que algunos pensaran que Apple iba a sacar en iTunes por fin el patín volador. Al no ser así, cundió el desánimo y las críticas exacerbadas, que incluían manifestaciones muy coherentes y legítimas y también otras tan profundamente estúpidas como por ejemplo que TODO EL MUNDO ya tenía esos discos, cosa que después se manifestó incierta cuando estos discos arrasaron en ventas en la iTunes Store e hicieron a Apple, si cabe, un poco más rica.
Pero no quiero hablar ahora de todas estas historias sino de lo que realmente ha significado para mí el hecho de ver a The Beatles en iTunes, un cambio más profundo de lo que habría pensado en un principio.