Un regalo de un amigo
Esta mañana recibí un misterioso e-mail de pelicos, el lector de este blog al que liberé sus dos iPhones en mi propia casa, en pijama mañanero. Quería pasar un segundo a verme al trabajo porque decía tener una cosa para mí. Intrigado, me puse en contacto con él y a la media hora más o […]