Blog

  • Pedro y los 16 GB

    ¿Conocéis el cuento de Pedro y el lobo? Pedro era un joven pastor que disfrutaba engañando a sus vecinos, haciéndoles creer que su rebaño estaba bajo el ataque de un lobo. El día que de verdad el ataque se produjo, ningún vecino acudió a socorrerle y sus ovejas perecieron bajo las fauces del lobo.

    En nuestro pequeño mundo, el lobo se llama 16 GB, y la posibilidad de que en un iPhone no sean suficientes por diversos motivos. Repasemos cuales:

    • 2010 iPhone 4: aparece la primera pantalla retina y todos entienden que las apps van a aumentar mucho de tamaño para dar cabida a la nueva resolución. Asimismo, los vídeos a 720p amenazan con devorarlo todo.
    • 2011 iPhone 4S: ahora sí que sí, porque los vídeos son a 1080p y además no hay manera de configurarlos para una calidad inferior.
    • 2012 iPhone 5: más pulgadas de pantalla, más gráficos para las aplicaciones. Además, la cámara tiene más calidad por lo que las fotos y vídeos aumentan de tamaño.
    • 2013 iPhone 5S: esta si es la buena, con una cámara que al parecer supera en mucho a la del 5 y con un sistema de grabación de vídeo en Slow Motion que hará las delicias de propios y extraños cuando vean todas nuestras tomas de la procesión del Corpus de nuestro barrio. Y por si fuera poco el sistema es de 64 bits y cuando las apps se actualicen ocuparán mucho más espacio (?????).

    Al final estamos donde siempre, en el sentido común. Aquel usuario que necesita 32 GB los necesita independientemente del dispositivo que tenga. Aquellos que por el contrario hemos demostrado que podemos vivir con 16 GB, seguiremos haciéndolo.

    En mi caso, mis iPhones han tenido 8 (EDGE), 32 (3GS), 32 (4), 16 (5) y 16 GB (5S) respectivamente. Es cierto que fui a los 16 GB por precio, pero también es cierto que no me arrepiento y que además me lleva a hacer un uso más racional del teléfono.

    Es curioso además comprobar cómo con el iPhone se produce un efecto reductor cada vez que lo reinstalo. En cada ocasión que he tenido que hacer un arranque desde cero (tampoco han sido muchas), he terminado por instalar muchas menos apps de las que llevaba antes. El caso más llamativo es el actual; acabo de terminar de poner en marcha mi iPhone 5S y he pasado de 128 aplicaciones (incluidas las del sistema) a 53. Puede que en los próximos días de esas 53 me vaya a ¿60? pero aun así estaré por debajo de la mitad de las que tenía antes. Este efecto también se produce en el Mac; cuando Rocío se llevó el iMac de casa al trabajo y yo me quedé con el MacBook Pro, tomé nota de todas las apps instaladas en el iMac para instalarlas en el futuro sustituto. Nunca lo hice, y en mi Mac mini tengo actualmente muchísimas menos apps que tenía en el iMac. Y nunca las he echado de menos, pese a que de vez en cuando repaso el listado por si veo alguna app que me podría venir bien para alguna necesidad concreta.

    Es cierto que un iPhone recién estrenado va muy ligero, las apps todavía no han hecho mucho uso del espacio en local y el carrete está vacío, pero ahora mismo tengo 6,8 GB disponibles de espacio, con 890 MB de podcasts y nada de música (suelo llevar 1 GB a lo sumo porque tengo iTunes Match). Llevo instaladas apps de gran tonelaje como iMovie (664 MB) o Keynote (534 MB). Es posible que en breve instale alguno más de los sólo 2 juegos que llevo, pero también es posible que ese Keynote desaparezca por lo cual infiero que voy a disponer de unos 5 GB como poco para fotos y vídeos.

    Evidentemente este es mi caso y no tiene por qué ser el vuestro; no estoy tratando de convenceros de que 16 GB es el tamaño ideal para todo el mundo, sino que estoy respondiendo a la pregunta que más veces me han hecho por Twitter desde que comenté que iba a comprar el iPhone 5S y que me mantenía en 16 GB. La otra es por qué demonios lo compro dorado, pero eso es algo que va en el corazón, el cual no atiende a la razón 😉

    Será interesante revisar este artículo en Navidad y ver cómo me ha ido. ¿Me habrá comido el lobo?

  • Especial Halloween

    Emilcar Podcast 56 se disfraza de Emilcar Daily Especial para la noche de Halloween, con una emisión en directo a través de Spreaker con José Antonio Blanco como invitado. No te lo pierdas.

  • Applesfera – Tweetbot 3

    Applesfera – Tweetbot 3

    El único punto negativo es que tendremos que volver a pagar por la nueva versión.

    En fin.

  • Limitado my ass!

    Cuando hablamos de comparar los dos principales sistemas operativos del mercado, iOS y Android, hay una característica que siempre sale en liza a favor de Android. Se habla siempre de que el sistema de Google es muy más personalizable, que se adapta más a las necesidades específicas de cada uno y así cada usuario puede configurar hasta los parámetros más insondables del sistema.

    En el mismo sentido, los detractores de iOS hablan de él como de un sistema limitado, cerrado, más rígido, más predeterminado, de tal suerte y manera que todos los dispositivos son básicamente iguales en comportamiento, apenas diferenciándose en aspecto estéticos como la ubicación de los iconos o los fondos de pantalla.

    Una vez más, la clave está en la usabilidad. El iPhone 5 con iOS 6 es el iPhone que menos tiempo he tenido en mi poder (poco más de un año) pero de lejos es el que más he usado. En todo este tiempo, he ido retocado distintos parámetros del sistema y de las aplicaciones, hasta llegar a un entorno perfecto para mí y que se ajustaba a mis deseos, necesidades y (por qué no decirlo) manías. Toda vez que he pasado por toda la fase beta de iOS 7 sin una sola restauración, entendía que mi sistema estaba seriamente necesitado de una renovación y por ese motivo he puesto en marcha mi iPhone 5S desde cero, sin restaurar la copia de iCloud.

    Al hacer esto, he podido disfrutar de la completísima secuencia de inicio de iOS7, mediante la cual he podido asimilar lo que ha cambiado iOS desde sus inicios y hasta qué punto se toma Apple en serio la seguridad de sus dispositivos, preocupación que me temo que no es compartida por otros fabricantes de hardware y software del mercado.

    En las apenas 24 horas que llevo usando mi nuevo iPhone 5S (¡dorado!) he podido darme cuenta de:

    1. Lo inteligente que es el teclado de iOS y lo que había aprendido de mí en un año.
    2. Lo mucho que acabas configurando las notificaciones de las distintas apps.
    3. Que Siri aprende de ti mucho más de lo que deja reflejado en tu tarjeta de contacto.
    4. La cantidad de cosas de uso común para mí (teclado emoji, luz de aviso de notificaciones, % de batería…) que no vienen predeterminadas en el sistema.
    5. Lo bonito que queda un iPhone nuevo con las aplicaciones del sistema y todas las gratuitas de Apple instaladas de golpe 🙂
    6. Cómo es posible que aunque tenga una idea muy clara de la ubicación de mis iconos, la propuesta por defecto de Apple me cautiva siempre.
    7. Cómo cambia el teléfono visualmente en función del fondo de pantalla que elijas y de los colores de los iconos de las apps, gracias a las transparencias de los centros y de otras pantallas.

    Y todo esto, y mucho más, sin salirse de las lineas generales de iOS establecidas desde 2007, evolucionando dentro de ellas e incorporando cosas quizá tarde, pero de manera muy meditada y asegurándose de su armonía con el resto del sistema.

    Obviamente para probar todo esto no hace falta comprarse un teléfono nuevo. Os animo a que hagáis una restauración DFU de vuestro iPhone y que, con las precauciones previas, configuréis iOS desde cero, no ya para ganar rendimiento sino para disfrutar como un niño de un sistema nuevo y reencontrarte con muchas opciones que elegiste quizá hace años y que no te habías vuelto a replantear.

    Puede que mi iPhone se parezca mucho exteriormente a otros miles de iPhones, pero a la hora de la verdad, a la hora de usarlo, este iPhone es mío, es único.

  • Hacía Falta sobre el iPad 2

    Hacía Falta #13: post-Keynote iPad

    Magistral, como siempre, su análisis de la keynote, especialmente a partir del minuto 50:30 cuando explican la verdadera naturaleza del iPad 2 y su permanencia en la gama iPad.

  • Actualizar versiones DVD de iWork y iLife

    No son pocos los usuarios que en su momento compramos iWork e iLife ((Lo mismo a priori para Aperture en su actualización a la versión 3.5)) en sus versiones en DVD, las últimas que Apple sacó en dicho formato. Ahora nos encontramos con la cuita de que parece que estas versiones ya no se actualizarán más. No es del todo cierto, aunque no es del todo fácil hacerlo. Por norma general parece que funciona lo siguiente:

    1. Abre la Mac App Store y sal de tu cuenta, vamos, logout de toda la vida.
    2. Cierra la Mac App Store
    3. Abre la Mac App Store y busca una de las apps que quieres actualizar, por ejemplo Pages. Se supone que ahora verás el botón de actualizar en vez de comprar.
    4. Dale a actualizar y haz login cuando te lo pida.
    5. Repite el proceso para cada app.

    Hay usuarios que pese a hacer esto no están consiguiendo el resultado deseado. Quizá pueda deberse a una actualización con número de serie en vez de desde el DVD. También es posible que la cosa falle si hemos movido las aplicaciones de sitio (a una carpeta distinta o algo así) y por tanto el Mac no es capaz de encontrarlas.

    Si buscas «iWork DVD» en Twitter te encontrarás todo tipo de casos, incluyendo algunos que encuentran disponibles las actualizaciones sin más, sin hacer nada, u otros a los que no les funcionaban ningún procedimiento pero que ahora afirman que Apple lo ha solucionado y ya todo funciona sin problemas y sin hacer nada raro. Comprobadlo vosotros mismos aquí.

    ACTUALIZACIÓN: Gracias a Fran Cimas nos enteramos de que todo esto te funcionará seguro si previamente cambias el idioma del Mac a inglés y la ubicación a USA. Y reinicias, claro.