Autor: Emilio Cano

  • Mac mini in da house

    Mac mini conectado a un monitor, con muchos cables por detrás y un teclado inalámbrico en una especie de soporte

    Finalmente me he comprado el Mac mini, en concreto el modelo con procesador i7 a 2,3 GHz y 1 Tb de Fusion Drive. Lo he comprado en Benotac, donde me ofrecían una financiación «casi» sin intereses y donde además me han traído este equipo a medida en una semana.

    Muchos me habéis preguntado por el rendimiento del equipo pero de momento no soy capaz de hacer un comentario serio. Apenas he tenido oportunidad de estar delante de él y el tiempo que le puedo dedicar lo empleo en instalar cosas y traer datos de aquí y de allá, toda vez que no estoy partiendo de la copia de ningún Mac anterior. Eso sí, las primeras sensaciones no pueden ser mejores en cuanto a velocidad, SILENCIO, presencia del equipo… Tengo muy claro que no me he equivocado en absoluto comprándolo.

    Ahora mismo estoy centrado en pensar cómo voy a distribuir mis datos entre el disco local y el NAS y cual va a ser mi patrón de copias de seguridad. Había pensado seguir haciendo la copia completa semanal en un disco USB pero usar una partición del NAS para copias de Time Machine, lo que pasa es que me aterroriza pensar en los tiempos de reinstalación si alguna vez no tuviera más remedio que restaurar desde esa copia de Time Machine.

    Como podéis ver en la foto de momento lo tengo todo muy desorganizado. El sitio natural del Mac mini es debajo del soporte del monitor, donde cabe perfectamente. Todo ese lío de cables que se ve también será reducido a su mínima expresión, pero cables tendré, porque esto no es un iMac, claro. Estoy emocionado porque el Mac mini incluye un adaptador de HDM a DVI; hacía AÑOS que no compraba un producto Apple que incluyera un adaptador, cable o lo que sea de regalo 😀

    Algunos me habéis preguntado vía twitter por ese soporte donde parece estar el teclado. Se trata de la Origami Workstation de Incase, para iPad y teclado inalámbrico. Es en realidad una funda para el teclado que cuando se abre permite doblar la parte superior de la manera que se ve en la foto para poder así poner un iPad ahí. Fue el primer producto que me compré en el Apple Store Nueva Condomina 🙂

  • Kancha, accesorio para colgar cosas en tu Mac

    Kancha imac hook

    Kancha es uno de esos dispositivos que, de haber sido ideados en Estados Unidos, sería carne de Kickstarter y recibiría seguro el empujón de prestigiosos blogs y notables gurús. Este accesorio es el proyecto de un valenciano, Jorge Vilanova, quien se puso en contacto conmigo y me envió una unidad de prueba.

    La idea es tan sencilla como útil: un gancho de metacrilato que se adhiere con un adhesivo a la parte superior del iMac permitiéndonos colgar en su extremo inferior principalmente unos auriculares pero también toda clase de accesorios que se presten a ello, como podéis ver en este set de Facebook.

    Aunque yo ya no tengo iMac en casa, mi mujer ha estado usando Kancha for iMac en el trabajo para su función principal de dejar auriculares. Ella ha probado con los del iPhone pero son demasiado ligeros para que se queden bien colgados sólo por el cable. Sin embargo los auriculares del manos libres de su teléfono fijo sí se quedan perfectamente sujetos.

    Evidentemente el diseño de Kancha for iMac lo hace incompatible con los nuevos iMacs ultradelgados, pero dado que se han vendido millones de iMacs de aluminio convencionales y ni un solo iMac de los nuevos (a fecha de hoy) pues todavía hay un mercado estupendo para este accesorio. En caso de que preveas la compra de uno de estos nuevos iMacs, creo que Kancha Jr. for MacBook Pro se adaptará perfectamente al nuevo diseño.

    Kancha for iMac cuesta 20€ y Kancha Jr. for MacBook Pro cuesta 15€, ambos con gastos de envío incluidos. Podéis verlos y comprarlos desde su web.

  • Comparando stylus para iPad

    Bienvenidos a la que sin duda es la más exhaustiva y detallada comparativa de stylus para iPad que encontrarás en español. Bueno, en realidad no, ni muchísimo menos. Simplemente he comparado de manera muy funcional tres modelos, sin profundizar mucho, pero suficientemente como para tomar una decisión de compra de la que no me arrepiento.

    El gordo

    Imagen de un AluPen en color negro, un stylus de forma hexagonal

    Al poco tiempo de comprar mi iPad original (parece que fue hace 10 años) compré un AluPen de JustMobile, conocida marca de accesorios para productos Apple con una interesante linea de diseño. Este AluPen se puede enmarcar en la categoría de stylus gordos, como por ejemplo también el Cosmonaut. Se siente bien en la mano por tamaño y también por peso, y desde mi punto de vista son ideales para boceto y para dibujo. Sin embargo a la hora de escribir este AluPen en concreto me ofrece poca precisión. Es cierto que las apps hacen mucho respecto a la sensibilidad a la hora de usar un stylus, pero he podido comprobar fehacientemente que usando la misma app en mi iPad (el gestor de partituras forScore), se escribe muchísimo peor con el AluPen que con el siguiente stylus del que voy a hablar.

    El perfecto

    Foto de un Bamboo Stylus en negro, con forma redondeada

    El Bamboo Stylus es conocido como el más perfecto de los stylus. Su nombre fue el que más salió en las respuestas cuando pedí por Twitter consejo sobre qué stylus comprar. Me llamó la atención cuando se lo vi a mi amigo @ruimonte en un ensayo del coro. Es un stylus de grosor similar a un bolígrafo y tiene una punta de goma casi idéntica a la del AluPen y otros modelos del mercado, pero algo más pequeña. En las pruebas que hice pude ver que escribe perfectamente y que también es muy práctico para dibujos, trazos y esquemas, aunque en todo esto quizá el AluPen ofrece más comodidad.

    El raro

    Imagen de un Adonit Jot Mini en verde metalizado, donde se puede ver el extraño disco que tiene en la punta

    Dado que yo ya tengo un AluPen y que lo que necesitaba era mejorar la experiencia de escritura, decidí comprar un Adonit Jot Mini. Este stylus no se basa en una punta de goma sino en una micropunta metálica, acompañada de un disco que amplía la superficie de contacto sin perder precisión y ayuda a mantener una correcta orientación del stylus. Hay que acostumbrarse a esto; mientras los otros stylus tienen un manejo similar a un bolígrafo convencional, la inclinación del Adonit es fundamental para su correcto funcionamiento. Incluso la app Noteshelf tiene un preset para mejorar su comportamiento cuando lo usas. He elegido el modelo mini porque es más barato, tiene un enganche para el bosillo de la camisa (nerd!) y con la capucha enroscada arriba, su longitud es casi la del AluPen y no se siente demasiado pequeño.

    Conclusiones

    Efectivamente he podido comprobar que el Adonit Jot escribe muchísimo mejor y con más precisión que el AluPen y que también lo hace mejor que el Bamboo, no muchísimo mejor, pero sí mejor. A la hora de hacer dibujos y gráficos es resolutivo pero a mí (que dibujo como un niño de 5 años) me resulta más cómodo el AluPen por ser más grueso y más convencional.

    Creo que con estas breves notas ha quedado bien definido el comportamiento de cada uno, para que en función de vuestras necesidades podáis elegir el que veáis más conveniente. Básicamente mi resumen sería:

    Bamboo Stylus: perfecto y todoterreno.
    Adonit Jot Mini: el mejor para escribir.
    AluPen: mejor para dibujar.

    Sin duda vuestras opiniones pueden diferir de la mía, pero es que es un tema muy personal que también depende de habilidad y sensibilidad manual de cada usuario.

  • ¿Qué Mac mini comprar?

    Imagen frontal de un Mac mini

    Salvo mejor opinión de mi mujer (fan incondicional del iMac) en caso de que la mudanza no nos deje secos yo estoy convencido de comprar un Mac mini. Como comenté en un Emilcar Daily, me supone menos desembolso inicial y luego ya le puedo añadir más RAM o un monitor mejor que el que tengo, cuando económicamente pueda.

    Entiendo que el iMac es proporcionalmente más barato, al incluir en el precio una pantalla estupenda, teclado y ratón, pero en estos momentos el desembolso inicial es lo que más me preocupa.

    Así las cosas, mi elección sería un Mac mini con procesador i7 a 2,3 GHz al que le pondría una Fusion Drive por un precio total de 1.098,99 €. Sin embargo, un lector y oyente llamado Davil Silgo me sugiere que compre un Mac mini Server, también con un i7 a 2,3 GHz y dos discos convencionales de 1 TB cada uno, por 1.049 €.

    Me comenta David que puedo montar esos dos discos como uno solo, haciendo RAID 0 striped vía software. De esta manera tendría un único disco de 2 TB cuya velocidad se multiplicaría casi por 2. Aunque el propio David se ha enfriado un poco al descubrir que los discos que monta el Server son de 5400 rpm, yo he querido prestar atención a esta idea.

    Estuve navegando un poco por la red y encontré esta comparativa donde un señor compara un HD normal, un SSD y un RAID 0 con dos HD convencionales. Aunque el rendimiento del SSD está fuera de duda el tipo saca unas conclusiones muy interesantes, como por ejemplo que en acceso secuencial no dista mucho el RAID 0 del SSD, por lo cual si estás trabajando con archivos grandes de audio o vídeo, una vez que ya has abierto la aplicación y el archivo, el rendimiento es fantástico.

    Dado que el precio es más o menos igual, tengo que elegir entre la velocidad inmediata que da el Fusion Drive con 1 TB o la velocidad en el largo recorrido que también me da el RAID 0 y con 2 TB de espacio.

    He simplificado mucho las explicaciones técnicas para evitar que os duela la cabeza como ya me duele a mí. ¿Vuestra opinión, por favor?

  • Emilcar Podcast y Emilcar Daily

    Tras el experimento de tener ambos podcast en un mismo feed, he decidido separarlos. Toda la información que necesitáis al respecto va a estar a partir de ahora siempre en una sección fija de este blog a la que se puede acceder desde el menú principal: Emilcar Podcasts.

  • Elementos duplicados en el menú contextual «Abrir con»

    Captura de un menú contextual donde se puede ver que la app VLC aparece cuatro veces

    Vía Twitter se queja @osespe que cuando abre el menú contextual «Abrir con» sobre un archivo en su Mac le aparecen multitud de iconos de aplicaciones duplicados. Como podéis ver en la captura que preside este artículo, el hombre no miente.

    La solución sencilla a esto es descargar Onyx o cualquier otro software de mantenimiento para Mac. En el caso de Onyx tenemos que irnos al menú Mantenimiento, submenú Reconstruir, activar la opción LaunchServices y darle al botón Ejecutar que hay abajo a la derecha. Esperar y listo.

    Onyx, al igual que otras aplicaciones similares para Mac, no es más que una interfaz gráfica para poder aplicar amigablemente algunos comandos de Terminal. Estoy seguro que existe un comando que sirve para esto mismo y que es el que ejecuta Onyx de fondo cuando elegimos esta opción, pero creo que usar Onyx (o similares) es mucho más cómodo para la mayoría de nosotros.