El largo brazo de la transcodificación

Todavía me dura la resaca de estar indagando qué hacen los distintos hosting con los archivos que les subimos. Los podcasters más veteranos nos sorprendemos especialmente con estas prácticas porque no son históricamente habituales en el sector. En ningún momento se nos habría pasado por la cabeza, en los primeros años del podcasting, que un hosting pudiera transcodificar los archivos que le subes, que el audio que creas no sea el que directamente le llega a tus oyentes. Sin embargo tenemos que ver esto como una consecuencia más del desmesurado crecimiento del sector. Un hosting de podcasts no deja de ser un negocio de hosting, donde el suministro principal son los megabytes de espacio en servidor para almacenar horas y horas de contenido de tus clientes. Después viene “el arte” ¿verdad? Las ideas que tienes respecto al podcasting y cómo las materializas en la interfaz de usuario y en las características de tu servicio. El mercado aprieta y todos los actores deben ser generosos con sus planes gratuitos, como primer paso para convertir a esos usuarios en clientes de pago o como medio para disponer de un importante inventario de audios a los que inyectar publicidad para monetizarlos. Es una lucha cruel donde hemos visto y veremos a muchos quedar en el camino, y donde la principal estrategia reside en ofrecer lo máximo posible al mínimo coste alcanzable. Y aquí es donde los megabytes de espacio en servidor de miden al milímetro, motivo por el cual muchos hosting transcodifican los audios (incluso en los planes de pago) para asegurarse una uniformidad y racionalidad en el tamaño de los archivos que distribuyen. Supongo que también hay una motivación técnica por detrás, de cara a asegurar una máxima compatibilidad con la inserción automática de anuncios y con el stream que se realiza desde los reproductores embebidos en web.

Acast transcodifica y elimina las etiquetas ID3 que marcan secciones dentro del podcast y añaden información legible directamente desde el archivo. rss.com transcodifica (menos salvajemente) y, aunque no elimina las etiquetas ID3, sí elimina las imágenes que hayas podido cargar dentro del MP3 como carátula de cada sección; exactamente igual hace Substack. Esas imágenes incrementan el peso del MP3 y por ello los hosting las eliminan en sus procesos perdiendo una parte importante de los metadatos que hacen al podcasting un medio tan interesante. Afortunadamente hay gente que se vio venir esto. Las normas del Podcasting 2.0 incluyen nuevas etiquetas dentro del feed para que las secciones vayan ahí marcadas y las imágenes de dichas secciones se carguen desde el servidor y no desde dentro del archivo. rss.com incluye esta funcionalidad, pero desgraciadamente pocas apps lo implementan (de las más populares, sólo Podcasts Addict). Corren tiempos regulares para aquellos que queremos usar todas las funcionalidades del podcasting, sin duda otro de los efectos de la popularización y masificación de este medio.