Recientemente he tocado en este blog el tema de las versiones premium de podcasts existentes. He dedicado un artículo al contenido y otro a la forma. Durante el proceso de creación de ambos artículos, puse en marcha de forma privada una versión premium de Emilcar Daily, mi podcast diario de tecnología.
Si una versión premium de un podcast convencional es un reto, hacerla de un podcast diario es un reto todavía superior, así que pensé que llevar a cabo este experimento serviría para ir comprobando todos los puntos que me surgían en mi investigación para escribir esos artículos.
Para hacer el experimento usé lo que tengo más a mano, mi web emilcar.fm en WordPress donde tengo instalados los plugin Powerpress y Restrict Content Pro mediante los cuales ofrezco Weekly, mi podcast premium semanal. Fue tan sencillo como configurar un canal adicional de podcast privado y conferirle los mismos permisos que al de Weekly, de forma que algunos suscriptores de Weekly pudieron ayudarme con las pruebas.
El planteamiento de Emilcar Daily Premium no era distinto del que debe serlo el diseño de producción de cualquier podcast. Los añadidos que tenga este podcast no pueden comprometer su lanzamiento en el día a día. Por ello, partí de la premisa de que Emilcar Daily Premium estaría disponible a las 00:01 de cada día (contrariamente a las 7:00 de la versión normal), que estaría codificado en estéreo y 320kbps y que no tendría publicidad. Hice pruebas del tiempo que tardo en retirar los patrocinios leídos por mí durante la grabación de cada capítulo de Emilcar Daily y establecí un flujo de trabajo al respecto. Estuve haciendo pruebas también con la posibilidad de incluir una carátula distinta para cada capítulo, pero no tengo el talento y el conocimiento para hacerlo con cierta calidad en poco tiempo, así que lo deseché. Y no me costó mucho hacerlo, porque prescindir de esto supone que los suscriptores de este Emilcar Daily Premium pueden disfrutar permanentemente del fabuloso logo creado para el podcast por Pedro Luis Alba.
Concluida la prueba, publicados los artículos y siendo todo satisfactorio, pensé «¿y por qué no?». Sólo me quedaba acudir a una de las sesiones mastermind que tengo con Víctor Correal en su podcast No es asunto vuestro para tomar el resto de decisiones.
La decisión principal que quedaba por tomar era dónde publicar el podcast, y la elección fue Mumbler. Aunque me seducía la idea de tenerlo todo en mi web, la sencillez de Mumbler como plataforma la hace ideal para un proyecto de este tipo, en el que no puedo cargarme de trabajo adicional para no atentar contra la viabilidad esperada. Mumbler es quien soluciona los problemas técnicos, quien da soporte a los clientes, quien les emite las facturas. Yo sólo tengo que entrar a su fabuloso dashboard y subir el capítulo nuevo de cada día.
Una vez que la parte técnica está solucionada y el podcast está en marcha, sólo me queda prestar atención a la difusión. Ya he publicado un capítulo de Emilcar Daily acerca de Emilcar Daily Premium, y también lo he difundido por redes sociales pero, conociendo como conozco el esfuerzo que supone vender podcasts premium, debo hacer un plan de difusión consistente, que no se limite a publicar un tweet de vez en cuando y a anunciarlo en Emilcar Daily las semanas en que no tenga patrocinador.
Y, seguramente, coincidirás conmigo en que en esta parte es donde los podcasters fallamos más. Somos muy buenos creando contenido pero pésimos difundiéndolo. A ver si me enmiendo 🤗