El título de este post puede parecer un poco radical, pero tiene su explicación. Como he comentado hasta la saciedad, mi padre esperaba al Mac mini Core 2 Duo para hacer su switch. ¿Por qué ese modelo? Pues porque en su momento yo pensé que era lo mejor. Era realmente un ordenador que me encantaba y que me parecía lleno de posibilidades, un merecedor del apelativo «The Switchers-Maker», el «Hacedor de Switchers». Sin embargo ahora pienso muy distinto.
Cuando me planté con mi padre ante el expositor de la fnac tenía claro que mi padre necesitaba un Mac con Super Drive, por tanto la opción era el Mac mini 1,83 Ghz (779 €) o el iMac 17′ 2 Ghz (1.169 €). En su momento el Mac mini me pareció la mejor manera de convencer a mi padre: «Mira, eso es la torre, eso tan pequeño. Y puedes usar tu monitor, tu teclado y tu ratón y listo».
Pero claro, cuando mi padre empezó a preguntarme diferencias entre estos dos modelos me di cuenta de que el iMac, por 400 € más incluía pantalla de 17′ panorámica con iSight integrada, más procesador, el doble de RAM, el doble de disco duro, gráfica ATI con 256 RAM dedicadas, teclado y ratón. Ambos vimos rápidamente que no hay color y mi madre confirmó nuestra decisión al enterarse que todo eso funciona con un solo cable: el de la toma de corriente. Realmente coincido con el último podcast de cuatrodoce en afirmar que el Mac mini tiene pendiente una revolución mucho mayor que simplemente ponerle un Core 2 Duo. El mercado lo demanda.
Las comillas de título son porque seguro que hay otros motivos para comprar un mini. El motivo económico puede ser uno muy poderoso: aunque comparativamente el Mac mini es carisimo, los 400 € de diferencia pueden suponer un abismo para mucha gente. Por otro lado, mi padre usaba hasta ahora un TFT 15′ de HP bastante mediocre pero ¿y los que tienen un monitor bueno panorámico de 23′ que les ha costado cerca de 1000 €? Seguro que el Mac mini les seduce bastante. Otro motivo puede ser la portabilidad; aunque el iMac es muy fácilmente transportable, el Mac mini cabe en una mano (literalmente) y te lo puedes llevar allá donde te esperen una pantalla con su teclado y ratón.
Bueno, a mí no se me ocurren más motivos. ¿Y a ti? ¿Tienes un Mac mini? ¿Por qué lo compraste?